- Entrevista a Silvio Velo; capitán de Los Murciélagos*
Humildad por sobre todas las cosas. Voluntad como su mejor muestra de que todo se puede. Buen humor porque así la vida es más amena. Características que en estos tiempo revueltos carecen en una sociedad más preocupada por el tener todo que por el disfrutar de lo que se tiene. Sin embargo allí nos aguarda Silvio Velo, una persona a la cual podemos identificar con las tres primeras oraciones de este texto, en la puerta del bar que se encuentra dentro del CENARD. Con recientes 40 años, nació en San Pedro y vive aún allí junto a su mujer Claudia y sus cinco hijos, más allá de un lapso de tiempo en el medio en donde residía en la zona de San Isidro sobre la avenida Tomkinson, aquella que divide a esta ciudad de Beccar.
¿Quién te acercó la idea de formar parte del seleccionado de fútbol y desde cuando?
Empezé en el año 1991 cuando el profesor Enrique Nardone, que fue el creador de la selección argentina de fútbol para ciegos y que me conoció en el Instituto Román Rocell (entidad dedicada a la rehabilitación de personas no videntes), me invitó a formar parte. Él estuvo con nosotros hasta los Juegos Paraolímpicos de Atenas 2004, y luego fue quien me llevó a River.
¿En un principio te pareció una utopía poder llevar adelante el hecho de vestir la camiseta nacional?
Resultó complicado en un primer momento por el hecho de que no había nada organizado. Así como Enrique me llamó lo hizo con otros más para jugar un torneo con otras selecciones de América. No éramos ni amigos ni nada con el resto, tan solo conocidos.
¿Cuándo cambió todo para ser más ordenado?
Cuando en el año 1996 Nardone ya empezó a nutrir al equipo de jugadores de las ligas. Ahí empezó a verse otra cara de este deporte con algo más organizado y elaborado.
A esto le sumamos que vos fuiste el creador del apodo y así nacieron los Murciélagos.
Sí, una cuestión más que obvia el por qué, je.
¿Qué cosas hacías en tu infancia y adolescencia como entretenimiento?
Yo tuve un apego desde muy chico con el fútbol, desde el vamos por el hecho de tener once hermanos con lo cual era inevitable darle a la pelota. También jugaba mucho con mis amigos, con los que me sentía uno más.
¿Y aparte del fútbol?
Competía en atletismo, específicamente en salto en largo y velocidad. Iba adonde hubiera un torneo. Me gustaba mucho también eso.
¿Estás trabajando actualmente?
Sí, soy empleado en ANSES allá donde vivo en San Pedro. Tuve la suerte de que ahí me abrieran las puertas. También me las abrieron en el Román Rocell, no me puedo quejar, soy un afortunado, je.
¿Cuál creés que debe ser la característica más importante que debe tener un no vidente para poder jugar a este deporte?
Principalmente debe haber mucha decisión y voluntad de que se puede hacer, ya que hay mucho contacto físico con el rival y uno debe dejar los miedos de lado.
¿Tienen prácticas muy exigentes?
Sí, Martín (Demonte, el actual director técnico de los Murciélagos) nos amolda los ejercicios pero nos dan bastante duro igual.
Como capitán, ¿Qué tipo de líder te considerás?
Normal, se dio así lo de que sea capitán, no me subo en ningún pedestal. Para mí el liderazgo se demuestra en los hechos, y yo soy uno más acá adentro. Por ejemplo, si entrenamos a las dos, yo llego dos menos diez acá como cualquiera de mis compañeros.
¿Qué contención le das a los jugadores nuevos que van surgiendo?
La que puedo, alentarlos, darles ánimo en cada entrenamiento y partido; después del resto se encarga el psicólogo del plantel, yo no me meto.
¿Qué crítica hacés de la falta de mayores recursos que hoy sufren los deportes olímpicos y paraolímpicos por parte del gobierno?Lamentablemente acá hay muchos deportistas que sudan hasta la última gota por poder competir y lo hacen sin la ayuda de absolutamente nadie. Pareciera como que el gobierno tiene que ver resultados positivos para apoyarte cuando en realidad debería de ser al revés. No hay que esperar que se obetenga una medalla para invertir en estos deportes que tanta satisfacción dan. Igual hay que estar tranquilos y pensar en ser inteligente sabiendo que las cosas se dan así, que esto tampoco se convierta en excusa al momento de competir.
¿Deberían ser reconocidos socialmente más de lo que lo son?
Todo esto es paulatino y considero que estamos por un buen camino. Antes no teníamos ni botines para entrenar y ahora sí, y eso se lo debemos a cómo los medios nos ayudaron con esto.
¿Vos como exponente y persona reconocida no sentiste que alguna vez te hayan usado por conveniencia?
Nunca lo sentí así, trato de no pensarlo de esa manera sino al revés. En tanto y en cuanto se interesen por mí, los Murciélagos abarcaremos mayor espacio en los medios y eso es lo que tenemos que difundir, nuestro trabajo.
¿Sentís que abundan los prejuicios?
Es una realidad, vivimos todos llenos de prejuicios. Mientras, de a poco nosotros por lo menos vamos ganando mayor espacio.
¿Qué podría hacer la sociedad para ayudar a los discapacitados para no excluirlos?
Depende de uno, en la dignidad de cada persona. Creo que al darle la herramienta a un discapacitado para no aislarlo se está haciendo una buena contribución. La discapacidad limita menos de que uno cree.
Les toco el grupo de la muerte donde se encuentran Brasil, China, Francia (último campeón europeo) y Camerún. ¿Qué chances concretas creés que tienen de repetir el título?
Todas, uno se prepara, tiene expectativas y esperanzas, pero en el medio pueden pasar diez mil cosas. Tenemos con qué pelearla.
Te llaman el “Maradona de los ciegos”. ¿Lo pudiste conocer a Diego?
No, nunca pude cruzarme y charlar con él, más allá de que fuimos invitados a La Noche del 10. Siento una gran admiración y orgullo de que el mejor del mundo sea de acá. Nunca pude ver una jugada de él pero me las imagino cuando escucho que hablan de ellas.
*(Agradecemos a Matías Prado y Sofía Sarmiento por hacer la entrevista y dejarnos publicarla)